Libro que ha de entenderse como un compendio del buen hacer de un grupo numeroso de alumnos y alumnas que, durante algo más de tres décadas, y por momentos, en sus clases de Lengua Castellana, han sido capaces de dar lo mejor de sí mismos a la hora de contar experiencias, dar sus opiniones, expresar sus sentimientos y emociones, o utilizar elementos imaginarios. Textos que, celosamente, ha guardado Javier Carnicer por creer que era lamentable que se perdieran en el olvido y por lo que ha decidido compendiarlos, como perlas de gran valor.