El Hotel Latorre es una elegante edificación construida en pleno Casco Histórico de Caspe bajo el estilo arquitectónico del eclecticismo, imperante en la arquitectura española de los primeros años del siglo XX. Su construcción al parecer fue proyectada por el técnico de Obras Públicas, D. Miguel Lapuerta Bosque, a petición de sus propietarios, durante los años 20 del siglo XX. Desde entonces y hasta su reciente cierre, siempre ha mantenido su uso hotelero. Debido a las lógicas necesidades de mantenimiento y mejora, sufrió importantes reformas en los años 50 y 70, que modificaron de la distribución interior de algunas zonas, algunos pavimentos y partes de la decoración mural. Consta de tres plantas en altura y varios sótanos.
La fachada principal se articula siguiendo un esquema tripartito y en su centro la puerta de acceso bajo un arco rebajado. En la primera planta destaca un ventanal con triple vano de medio punto y un triple vano adintelado en la segunda planta. A ambos lados del acceso principal se disponen dos locales comerciales bastante transformados y sobre ellos dos balcones rematados por un curioso frontón triangular. El conjunto se remata con una gran cornisa sobre la que se dispone la planta bajocubierta coronada por una cubierta plana, probablemente de construcción posterior. La fachada lateral es mucho más sencilla y sus vanos adintelados se decoran con finas molduras. La unión de las dos fachadas se realiza mediante un chaflán que presenta dos miradores volados.
Consta de plantas baja, primera y segunda más una última planta bajocubierta, además de sótanos para instalaciones, bodegas, cuadras y un garaje. En la planta baja se sitúa el acceso principal, consistente en un amplio zaguán decorado con un arrimadero de cerámica vidriada y policromada de inspiración árabe, que conduce a la gran escalera central que conserva una barandilla decorada con interesante motivos de inspiración modernista.
En planta primera se localiza un salón-comedor, también decorado con un arrimadero de azulejos y un pavimento de baldosa hidráulica desaparecido en el resto de las estancias. En el ala izquierda de esta planta se sitúan las cocinas, mientras que en el ala derecha se ubican varias habitaciones. Ya en planta segunda se localizan, en el ala izquierda la vivienda de los propietarios y en el ala derecha otras habitaciones. La planta bajocubierta se encuentra actualmente ocupada por más habitaciones y un espacio vacío, que debió cumplir funciones de almacén.
Este edificio, en el momento de su construcción, supuso un punto de referencia para los caspolinos tanto por su uso hotelero, que animó en cierta medida la vida social de Caspe, como por su formalización dentro de la trama consolidada de la localidad.