Torre de la Iglesia de San Miguel

Linás de Broto ya existía en el siglo XI, aunque por su situación aislada entre las montañas no necesitó fortificaciones. Esta torre se construyó a finales del siglo XV, como prevención a las invasiones francesas. Se alza sobre una ladera adosada a cuyos pies se encuentra la iglesia parroquial de San Miguel de construcción posterior. Actualmente es la torre campanario de la iglesia pero mantiene en esencia su aspecto de torre defensiva y fortificada.

La torre es de grandes dimensiones, de planta rectangular y es claramente defensiva, conservando en perfecto estado dos buhardas apoyadas sobre ménsulas en su cara este al igual que en la parte posterior, aunque de éstas solo quedan los huecos. Presenta saeteras en sus caras. El remate de la torre fue modificado abriendo huecos para campanas y se cubrió con un tejado a dos aguas.